El líder espiritual Sathya Sai Baba, uno de los más venerados de la India, murió ayer a los 84 años en un hospital de su ciudad natal, Puttaparthi, donde estaba internado desde finales de marzo por problemas cardíacos, pulmonares y renales.
“Sai Baba ya no está más con nosotros físicamente. Respiró por última vez a las 7.40 y murió por un fallo cardiorrespiratorio. Su cuerpo será mostrado durante dos días para que sea venerado”, precisó en un comunicado el Instituto Superior de Ciencias Médicas de Puttaparthi, en el estado de Andhra Pradesh.
Miles de sus seguidores se acercaron para dar el último adiós al hombre al que se le atribuían poderes sobrenaturales y milagros, como hacer aparecer objetos o curar enfermedades terminales.
El gurú era considerado por sus devotos como la reencarnación de un hombre sagrado, Sai Baba de Shirdi, que murió en 1918.
La organización que lideraba Sai Baba fundó proyectos sanitarios y educativos en toda India, incluyendo hospitales y clínicas, como la institución en la que murió ayer.
La organización que lideraba Sai Baba fundó proyectos sanitarios y educativos en toda India, incluyendo hospitales y clínicas, como la institución en la que murió ayer.
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