MOSCÚ, Rusia.- La Declaración
final de la cumbre del Foro de Cooperación Económica Asia-Pacifico (APEC) se
pronuncia hoy por garantizar una seguridad alimenticia y energética, así como
por el combate a la corrupción y la solución de la crisis europea.
El documento aprobado en Vladivostok señala que es necesario incrementar
la productividad de la agricultura y garantizar buenas condiciones de trabajo e
inversiones para los pequeños agricultores.
La declaración aboga por ampliar
el acceso a los productos alimenticios de las capas más vulnerables de la
población y por el empleo de forma racional de los recursos marítimos y la
lucha contra la pesca furtiva y el contrabando en ese sector.
Además, llama a desarrollar un
sistema abierto, estable y previsible de transporte de los alimentos. Respecto
a la seguridad energética, el APEC estima necesario el incremento de la
presencia del gas natural en el balance energético de la región, sin descartar
las perspectivas de la energía atómica.
Asimismo, estipula una evaluación
de la influencia del gas shale en el medio ambiente y de otros gases no
tradicionales y desarrollar sistemas de suministro energético con bajo nivel de
emisión de gases tóxicos.
En ese sentido, estipula que el
gasto energético del APEC para 2035 debe reducirse en 45 por ciento en relación
con 2005.
Por otro lado, el documento se
refiere a la crisis en la Unión Europea y saluda la decisión de ese bloque de
garantizar la permanencia de la Eurozona, pese a la crisis de la deuda
regional.
El APEC se pronuncia por reducir
los desniveles en las balanzas de pagos para economías con un alto superávit
comercial y por una mayor flexibilidad de los cursos de la moneda para evitar
las devaluaciones como forma de aumentar la competitividad.
Medios de prensa locales
consideran que tales recomendaciones se refieren a China, con un abultado
déficit comercial con la mayoría de las economías del mundo y que la víspera
rechazó un nuevo reclamo de Washington de fortalecer el yuang.
Asimismo, la declaración aboga por
reforzar la lucha contra la corrupción y los mecanismos para enfrentar ese
flagelo, por impedir "puertos seguros" para activos obtenidos
mediante corrupción o la salida de las naciones de personas que pagan o aceptan
sobornos.
Fuente: Prensa Latina.
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