Hiraldo Guerrero firmó ante la Segunda Sala de la Suprema
Corte de Justicia, que preside la magistrada Miriam Germán Brito.
El general retirado enfrenta cargos por asociación criminal
con la red de narcotraficantes que dirigía el capitán Quirino Ernesto Paulino
Castillo y otros grandes carteles de la región.
Inicialmente, el exjefe de operaciones del organismo
antidroga decidió no firmar voluntariamente su extradición, por lo que la
Suprema inició el conocimiento de esta solicitud por parte de Estados Unidos.
En el transcurso, Hiraldo Guerrero pidió a los jueces de la
Segunda Sala Penal que identificaran a sus acusadores en el expediente en su
contra. Sin embargo, esta solicitud fue rechazada, por lo que el acusado
decidió entonces firmar su salida voluntaria para los Estados Unidos.
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