SANTO
DOMINGO, República Dominicana.- “Algunos pregonan ser periodistas, aunque no
todos los son. Citemos al locutor, al productor de programa, al articulista
ocasional, la actriz, la reina, el abogado, el economista, el contador, el
ingeniero, el profesor o el médico de después de hablar y escribir varias veces
en un medio, se sienten la sensación y la tentación de considerarse periodistas.
Y es que la usurpación, en un acto de deshonestidad de los impostores, ha
arropado la profesión de periodista, como a ninguna otra”.
La
Ley 10-91 es clara e inteligente. Ella refiere que “al momento de contratar
PERIODISTAS….. ( no al locutor, actriz, reina, político, politólogo, abogado, sociólogo economista, contador, ingeniero, profesor o médico) “los medios darán
preferencia a los graduados”.
Tomado
del libro “La Ética en el Periodismo”, de Oscar López Reyes. Página 124.
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