Si tan interesado está el Gobierno, como indica la intensa
propaganda que ha desplegado, en convencer al país de la necesidad de un Pacto Fiscal debe convencernos primero de
que está en la disposición de mejorar la calidad de su gasto, pero eso no es lo
que está ocurriendo sino todo lo contrario.
Curiosamente es en las
“compras menores”, que no necesitan ser sometidas a licitación ni a mucho
papeleo, donde da muestras de una ligereza que espanta, pues mucho o poco son
dineros públicos que aportan los contribuyentes.
Cuando todavía sufrimos los efectos del asombro que provocó
la noticia de que la Contraloría General de la República gastó tres millones de
pesos en bonos que regaló no se sabe a quién ni porqué, nos enteramos de que en
el Ministerio de Hacienda andan en los mismos pasos.
Un total de RD$35, 640, 359 por concepto de “compras menores”
gastó ese ministerio en cuatro meses (de enero a mayo), donde llama la atención
los RD$2,437,045 para celebrar una
fiesta por el “Día de la Integración”, en la que se consumieron RD$ 645,198 en
pizzas, hot dogs, nachos y refrescos, y RD$1, 521,374 en una actividad, también festiva, por el Día de las Madres.
Los datos “colgados” en el portal de Hacienda revelan que en
marzo gastó RD$579,852 en la compra de 600 poloshirts para el Centro de
Atención para la Discapacidad (CAID), RD$447,976 en plantas ornamentales y
arreglos florales, y otros RD$644,280 en 700
souvenirs con estuche de maquillaje.
Lo dije en otra columna y lo repito
ahora: no me extrañaría que la verborrea peledeísta intente justificar la
pertinencia de esas “compras menores”,
pero en lo que a mí respecta pierden totalmente su tiempo, como también lo
pierde todo el que me hable de Pacto Fiscal.
Porque un gobierno que gasta nuestro dinero como lo gastan en Hacienda y
Contraloría, no merece que le paguemos un chele más de impuestos. Así de
sencillo.
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