Subscribe Us

 


La decadencia de los hospitales en la República Dominicana

Periodista Marino Báez, Reside en los Estados Unidos.

Por Marino Báez.      
ATMÓSFERA DIGITAL, SANTO DOMINGO.- Invertir en la salud es el mayor legado que el presidente de un país puede dejarle a sus habitantes, sin embargo, Danilo Medina parece a ser que esa inversión no reviste ninguna importancia, debido a un sinnúmero de hospitales que actualmente están abandonados, su construcción paralizadas, entre otros, que han sido terminados y fuera de servicios por vicios de construcción y a punto de desplomarse, una muestra fehaciente de que el sistema de salud dominicano es cada vez más inoperante.

Un ejemplo de las decadencias hospitalarias se refleja en los múltiples proyectos ejecutados mediante una tortuosa y mediática construcción. Veamos:

Hospital de Bonao, iniciado el 3 de mayo del 2017 y en pleno 2020 todavía está en proceso de construcción, faltándole más del 75% a su ejecución, sobre todo, en la recta final de un proceso electoral que se estila como el destino sepulcral del PLD (Partido de la Liberación Dominicana).

Hospital General y de Especialidades de la Ciudad de la Salud Charles de Gaulle, en Santo Domingo Norte, el cual tiene cuatro años paralizada su construcción y no aparecen los responsables ni autoridad alguna que reclame la terminación de la estructura de cinco plantas, avanzada en más de un 70%, aunque es de conocimiento del Ministro de Salud de que la misma  fue adjudicada a la empresa Carimex, parte de IBT Group y del Constructor, Consulting and Engineering (CCE) y está representada por el ingeniero José Ramón Brea.

Hospital Nelson Astacio, parte del complejo hospitalario iniciado durante la última gestión del presidente, Leonel Fernández, que incluye además, el Hospital Traumatológico Ney Arias Lora, la Maternidad Reynaldo Almánzar y el Centro Pediátrico Hugo Mendoza, así como la sede del Programa de Medicamentos Esenciales, paralizado y sin esperanza de ser terminados los trabajos de construcción de las referidas obras.

Esto significa un mínimo porcentaje de las cientos de obras estructurales, sobrevaluadas e iniciadas por los gobiernos peledeísta con préstamos internacionales aprobados al vapor por los legisladores para llenarse los bolsillos y sin esperanza de ser concluidas, lo que significa un irrespeto burdo al pueblo dominicano.

La inestabilidad, el despilfarro, préstamos sin justificación, presupuestos abultados para los ministerios, sueldos fuera récords para los legisladores, sobornos a seguidores  para garantizar la corrupción administrativa es el método defensivo de la corrupción administrativa.

El porcentaje de votos que le dan las encuestas al candidato presidencial del PLD, Gonzalo (El Penco) Castillo, es ficticio. Una estrategia del gobierno para continuar su inoperancia porque saben que si pierden las elecciones también perderán el apoyo a la impunidad.

Cualquier país subdesarrollado, excepto Haití, tiene más capacidad en el proceso de inversión de los recursos del Estado que el gobierno que hoy día nos representa. Es una pena que para poder subsistir muchos dominicanos se conviertan en víctima del oportunismo y la inoperancia del país.

La salud es primordial para que cualquier pueda desarrollarse y combatir las diversas pandemias que nos amenazan, sin embargo, esto no le causa el más mínimo revés al gobierno.

Que vergüenza, mientras en la ciudad de Whuan, en China, se construyó un hospital en 10 días,  con 1000 camas y con todas las tecnologías y comodidades, las construcciones de centros  hospitalarios en RD se pasan años hasta que se olvidan y si no le hacen una huelga su proceso de construcción sigue dilatado.

El hospital Huoshanshen con capacidad para albergar cientos de pacientes fue construido a toda velocidad en la ciudad de Wuhan, a los fines de contener el brote de Coronavirus que de acuerdo con las autoridades chinas empezó a construirse el 24 de enero y los primeros pacientes llegaron el lunes 3 de febrero, 2020, una muestra de que en nuestro país “la poca devoción quitan ganas de rezar”.

Un dato final, China gastó 40 millones de dólares para hacer un hospital de mil camas en diez días, mientras que en la remodelación del Hospital Cabral y Báez de Santiago, con 200 camas, el gobierno del PLD tiene  6 años construyéndolo y ha invertido 44 millones de dólares. ¿Digan ustedes si hay o no hay corrupción en la presente administración?

Los cambios se crean y dan resultados cuando se ejecutan sin intereses personalizados.

Publicar un comentario

0 Comentarios