Antonio Isa Conde o cómo socavar los intereses nacionales y criticar sin fundamentos

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Por Mario Lara Valdez.

ATMÓSFERA DIGITAL, SANTO DOMINGO.- El exministro de Energía y Minas, Antonio Isa Conde, fue el principal responsable de que se privatizaran las Edes en el país y hoy critica que el Gobierno carece de buenos gerentes, cuando en su gestión dejó un historial imborrable de mal manejo de la cosa pública.

El saneamiento de las instituciones públicas y la eliminación de aquellas instituciones que solo fungían como entes de corrupción, como la Corporación Dominicana de Empresas Eléctricas Estatales (CDEEE), y que por décadas fueron utilizadas para dilapidar fondos públicos, fue una de las principales tareas que heredó Luis Abinader de los llamados “buenos gerentes”.

De ser “buen gerente” Isa Conde no hubiese dejado las minas del país con el deterioro que las dejó, con la pérdida de cientos de empleos y sin un criterio responsable para el manejo de estos espacios para evitar pérdidas humanas, como las ocurridas en la Mina de Larimar, en Barahona que, en su momento, tuvo que ser cerrada por la falta de implementación de procesos para operar.

Su mala gestión o dejadez en el Ministerio de Energía y Minas llevó a que se tuvieran que paralizar las extracciones de minas en varias zonas del país porque los obreros no contaban ni siquiera con un manual de procedimientos y seguridad integral, provocando decenas de muertes, al quedar sepultados en su interior.

El actual Gobierno, ya con conocimiento de causa de la situación, procedió a iniciar un proceso de adecentamiento, principalmente en la Mina de Larimar de Barahona, la cual tuvo que ser cerrada provisionalmente luego de la muerte de varios obreros, mal que venía arrastrando desde que se iniciaron las operaciones en el lugar, sin que nadie le buscara una salida definitiva al problema.

El impacto de esta mina para los que allí se ganan la vida alcanza los miles de personas que se benefician directa o indirectamente de ella, pero fue totalmente descuidada en la gestión de Isa Conde.

“Se ha presentado un documento de seguridad integral de la Mina de Larimar y se establecerá una oficina técnica permanente para acompañar el trabajo de los mineros, lo que se traducirá en condiciones laborales más dignas”, había dicho el ministro actual de Energía y Minas (MEM), Antonio Almonte, al referirse a las precarias condiciones en que se encontraban las operaciones mineras en el país cuando el presidente Abinader asumió la gestión.

La situación de esa mina era un fiel reflejo de que, más que buenos gerentes que sepan administrar su tiempo, el pueblo dominicano lo que necesita es políticos que les duela su país y que lo defiendan en cualquier escenario, que sepan administrar cada peso del erario y lo destinen a las áreas necesarias porque no tienen otro fin más que trabajar y luchar para que su gente avance y tenga mejor calidad de vida.

A Isa Conde se le debe recordar que los dominicanos se cansaron de discursos bonitos y teóricos que en el fondo lo que hicieron fue distraer a un pueblo que fue engañado toda la vida para enriquecer a un grupo, mientras la miseria de la mayoría aumentaba pero la pregunta sería que hizo Antonio Isa Conde cuando le tocó dirigir Energía y  Minas.