SAN JUAN, Puerto
Rico.- El destacado artista caribeño Roberto Paniagua, egresado de la Escuela Nacional de Bellas
Artes en República Dominicana, nos cuenta como ha sido su vida tras el pincel.
Comenzó a
estudiar las artes plásticas de forma autodidactica, ha participado en
exposiciones individuales y colectivas, logrando poner empeño y amor en cada
lienzo que traza.
“Mi vida
tras el pincel ha sido mi mundo mágico, mi mundo lleno de retos y sacrificios,
comencé hacer mis pininos agarrado de la mano del maestro Nelson Batista, al
principio como todo fue sacrificio y responsabilidad y más cuando se es pobre y desea uno
superarse”, expresó.
Agrega que
cuando empezó a abrazar el pincel apenas conocía de cuadros ni modernos, ni clásicos, aunque
sí había visto algunos pero nunca pensó que terminaría enamorado del arte.
“Nosotros
los pintores, somos astros vivos que lanzamos nuestros destellos. El pintor es
un ser humano que obedece a su propio instinto y a su musa. Vivimos envuelto
siempre en ese mundo de colores, de fantasía y mágico”, dijo.
Este joven
artista no tiene como figura central para pintar un icono o personaje
permanente en sus obras, en ellas se pueden apreciar escenas campestres,
orquestas marinas, caballos en fin todo lo que le venga a la mente y alma de
este genio del pincel. Pero si una paleta rica de colores llenas de armonías en
la cual plasma temas cotidianos mostrándosenos su mundo mágico.

Participará,
próximamente en Puerto Rico en la Colectiva “Armonías del Caribe”, junto a
otros siete Quisqueyanos.
Publicado
por Robinson Castro.
atmosferadigitalrd@gmail.com.
Twitter:zamberos.
Instagram:
atmosferadigital.
0 Comentarios
Tu comentario es importante